Escrito por: HACHE HOLGUÍN (Bogotá, Colombia)
Diseñador editorial e ilustrador freelance desde el año 2000, bloguero en temas de creación gráfica desde el 2008.
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En 1989 el cantante británico Phil Collins se impuso en las listas de música del mundo con una canción conmovedora, “Another day in Paradaise”, el séptimo corte de su disco …But Seriously, tema en el cual el ex-baterista de Genesis narraba algo de la cotidianidad de la gente sin hogar, la canción inicia con el llamado desesperado que una mujer hace a un hombre que camina por la calle, ella le pide ayuda y refugio pero el hombre ignora su llamado y su sufrimiento.
Algo similar le sucedió a LEE JEFFRIES, solo que este fotógrafo si se dejó tocar por las problemáticas de la gente sin hogar. Su historia inicia cuando en el 2008, siendo contador de profesión y fotógrafo aficionado, se encuentra en Londres para correr una maratón, un día antes de la competencia sale a recoger con su cámara fotográfica lo mejor de la ciudad, y termina captando una escena dolorosa y conmovedora, una joven mujer durmiendo en la calle; la fotografía se convierte en una charla en la que LEE JEFFRIES se entera que la mujer tiene apenas 18 años, que su rostro está maltratado no solo por el efecto del ambiente callejero, sino también por su adicción a las drogas. Situación muy similar al paraíso que Phil Collins nos mostraba en 1989 en su “Another day in paraise”, y una realidad que a pesar del paso del tiempo, se resiste a cambiar.
El que si decidió cambiar ante esa problemática fue LEE JEFFRIES, pues desde ese día se interesó por las historias y los rostros de la calle fotografiando la gente sin hogar que habita en diferentes ciudades del mundo, captando las miradas brillantes, ingenuas y alegres que contrastan con la piel maltratada por los años, el clima, el ambiente y tristemente, el hambre.
JEFFRIES sabe que cambiar la realidad de estas personas es casi imposible, pero con su fotografía trata de darles un lugar en el mundo, hacerlos visibles y ante todo, generar conciencia sobre esta otra problemática que vale la pena combatir.
JEFFRIES suele retocar sus fotografías buscando un poco más de dramatismo, tratando de acercar más la toma a la realidad de cada uno de sus modelos, pues antes de hacer las fotografías suele charlar un poco con cada uno de sus personajes, conocerlos un poco para transmitir más que su rostro a través de su fotografía. Además, suele pagar con algo de dinero a todos los habitantes de la calle que le sirven de modelo para sus fotos, a quienes le gusta fotografiar mientras charlan, entablando una relación espontánea y alejada del interrogatorio periodístico, sus personajes suelen estar en soledad, acompañados únicamente por un fondo negro, con el que, seguramente, intenta mostrar el entorno poco esperanzador en el que conviven este tipo de personas.
La vida de LEE JEFFRIES cambio totalmente luego de esa primera toma a una persona sin hogar, en la actualidad dedica sus vacaciones a viajar por diferentes ciudades de Europa y Estados Unidos en busca de nuevas tomas, nuevos modelos, y nuevas calles nocturnas; su labor ha sido reconocida en diferentes concursos de fotografía, ha aparecido en varios diarios del mundo e incluso ha hecho un primer libro con lo mejor que ha captado, los fondos recogidos de toda esa labor han sido donados a organizaciones en pro de la población sin hogar. JEFFRIES sabe que cambiar la realidad de estas personas es casi imposible, pero con su fotografía trata de darles un lugar en el mundo, hacerlos visibles y ante todo, generar conciencia sobre esta otra problemática que vale la pena combatir.
Y como decía Phil Collins en “Another day in Paradise”, cuando veas a un habitante de la calle pidiendo ayuda, piénsalo dos veces antes de responder, pues es otro día para ti y para mí en el paraíso.
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